Viana do Castelo – Porto – Guimarães (III)

29 03 2010

Ciudad de Porto (II)

   Como terminé el post anterior en la explanada de la catedral de Porto ahí es donde voy a retomar mi relato esperando no aburriros demasiado ;-).  

Teatro Nacional de São João

Después de admirar las vistas que hay desde la catedral nos dirigimos a Praça da Batalha llamada así por la batalla que hubo en el siglo X entre los porteños y los sarracenos de Almanzor. Es una de las plazas emblemáticas de Porto, donde se concentraban los grandes cines y teatros de la época. Hoy se encuentra allí el Teatro Nacional de São João, inaugurado en 1798 en honor al Príncipe João (futuro D. João VI) con el nombre de Real Teatro de São João aunque en los primeros tiempos se le conocía como Teatro do Príncipe. El edificio original sufrió un terrible incendio en 1908 pero lo reconstruyeron y fue reinaugurado en 1920 con el aspecto que tiene hoy: un robusto y bonito edificio de color amarillo. Me quedó pena de no verlo por dentro pero cuando fuimos estaba en obras.

Igreja de San Ildefonso

  En un alto de la Plaça da Batalha está la Igreja de San Ildefonso, construida en el siglo XVIII, tiene la fachada cubierta de azulejos (para no variar… ;-P).

   Dejamos la plaza y nos metemos de pleno en la Rúa de Santa Catarina que es la calle de las tiendas. Está repleta de edificios modernistas ¡y de gente! (a pesar de que llovía muchísimo). Es peatonal y muy, muy, pero que muy larga. Decidimos resguardarnos y de paso conocer el famosísimo Café Majestic que se encuentra en el 112 de Santa Catarina. El Majestic fue inaugurado en 1921 con otro nombre (Élite), es de los cafés más antiguos y el primero que permitió el acceso a las mujeres de la ciudad. Antaño, era muy frecuentado por escritores, gobernantes y aristócratas. Cuentan que la autora de Harry Potter, J. K. Rowling, vivió tres años en Porto cuando nadie la conocía y que era cliente habitual de este local, en cuyas mesas escribió algunos de los primeros capítulos de la saga del pequeño aprendiz de mago que la han hecho tan famosa.

   Es un café, de puertas modernistas de madera,que conserva todo su mobiliario original. Su fachada es preciosa y al entrar te sientes transportad@ a otra época… He de deciros que me quedé enamorada del café y pienso volver cada vez que pueda. Además de ser muy bonito el trato es buenísimo, al igual que el café y los pasteles. De precio un pelín caro pero merece la pena, por lo menos para mí. Avisaros de que siempre hay mucha gente y si está lleno no dejan entrar hasta que se vacíe una mesa… nosotros tuvimos suerte y cuando entramos había varias mesas libres.

  Voy a terminar el post aquí por dos razones, la primera porque el post ya se ha hecho largo y la segunda porque quiero que os quedéis con la idea del Majestic y os animéis a tomar allí un café si vais a Porto. En el siguiente post sobre este viaje os contaré nuestro paseo por la Ribeira.

   ¡Hasta Pronto!

 P.D: Me voy de vacaciones de Semana Santa por eso no podré actualizar el blog durante unos días.